Entre noches confortantes, días soleados, deseos de playa, chipi chipi de Cobán
Vienes a mi mente
Asi como vuelvo a la poesía de vez en cuando
Como una recaída al vicio
Como el agua al jarro.
Callo entonces,
No sé si llamarte por tu nombre
Si invitarte a pasar.
Luego te vas,
En forma de aguacero
Sigo callada
No sé que hacer contigo.
Me aislo nuevamente
La poesía es mi tortura
La prosa no me quiere y
El ritmo ya no encuentra tin ton conmigo.
Soy un poeta inerte,
A veces tengo voz mas ya no sé si tengo fuerzas
Para callar esta pena
Que ahora emerge
Con un lamento que me devuelve
A la poesía
como su hijo bastardo.
Cansada como para recordarte
Y muy cuerda como para el olvido
Madura para el perdón
Realista como para una reconciliación
Y rencorosa para hablarte.
Siempre vuelves a mi
Entre las montañas del camino,
De vez en cuando cuando revivo
Pienso en ti para darme alivio.
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